Purifican nuestro aire, reducen el estrés y aportan una gran sensación de bienestar.
𝗣𝗼𝘁𝗵𝗼𝘀: la más popular. De rápido crecimiento y realmente fácil de reproducir mediante esquejes en agua.
𝗖𝗶𝗻𝘁𝗮: otro clásico de las plantas de toda la vida, súper fácil de cuidar. Conocida como "mala madre" o "planta araña". Su crecimiento es sobrenatural, pero lo que más nos gusta de ella es que es pet friendly.
𝗖𝗲𝗿𝗼𝗽𝗲𝗴𝗶𝗮 𝘄𝗼𝗼𝗱𝗶𝗶: conocida como “rosario de corazones”, se caracteriza por presentar unos tallos largos y finos de las cuales surgen pequeñas hojas.
𝗙𝗮𝗹𝗴𝘂𝗲𝗿𝗮: a pesar de ser una planta resistente, debes estar muy pendiente de proporcionarle la humedad ambiental que necesita. ¡Por eso es una de las preferidas para la decoración de baños!
𝗧𝗿𝗮𝗱𝗲𝘀𝗰𝗮𝗻𝘁𝗶𝗮 𝘇𝗲𝗯𝗿𝗶𝗻𝗮: sus características hojas con tonalidades púrpuras, rosadas y rosadas y rosadas. Cuenta con una increíble resistencia, pudiéndola cultivar tanto dentro como fuera de casa.
Las plantas de interior colgantes están en su mejor momento. Incorpora a tu ejemplar un hermoso maceta, de estilo macramé, que será el centro de todas las miradas.